Leyendo regularmente a un niño con pérdida auditiva
Leyendo regularmente a un niño con pérdida auditiva
Las familias fomentan la alfabetización al mirar libros, compartiendo historias, disfrutando de rimas y leyendo en voz alta con su niño que tiene pérdida auditiva. Al leer diariamente desde una edad muy temprana ofrece numerosos beneficios de aprendizaje y social. La capacidad auditiva del niño aumenta cuando le leen a diario. Su lenguaje se expande mediante la exploración de diferentes historias. Su habilidad de pensamiento crece al explorar los conceptos presentados en los libros. Las habilidades de conversación del niño se vuelven más complejas después de participar en diálogos sobre los cuentos y discusiones con adultos acerca de los libros. Las familias que leen en voz alta regularmente promueven avance en la comunicación, la cognición, la lectura, la escritura y el éxito escolar.
Las técnicas descritas aquí ayudarán a los padres a enriquecer las experiencias de la lectura en voz alta de sus hijos con pérdida auditiva. Estos consejos pueden ser utilizados en cualquier enfoque de lenguaje y comunicación. A través de la lectura compartida los padres y su niño puede desarrollar un vínculo especial entre ellos y el mundo de los libros. El uso de estas estrategias de gran alcance puede transformar el tiempo de la lectura en una rutina gratificante llena de asombro, la risa, confianza y aprendizaje.
Técnicas para mejorar la lectura en voz alta:
Ajuste—varíe cuándo, dónde y cuánto tiempo leerá para mantener la atención de su niño
Elija—seleccione diversas historias y libros ilustrados para despertar la curiosidad
Discuta—promueva la memoria auditiva recordando o recitando partes de las historias
Amplifique—relacione algunas historias a las experiencias propias del niño o juego imaginativo
Resalte—enfatice ciertas palabras periódicamente para introducir los sonidos del habla
Ritmo—adopte un paso que proporciona tiempo para la anticipación y la comprensión
Repita—ofrezca frecuentes oportunidades para leer y releer los favoritos
Estimule—utilice expresiones y demuestre que está disfrutando para incitar la audición
Tome turnos—comparta los roles para que el niño señale a las imágenes, pase las páginas y “lea”
Espere—haga una pausa a menudo para que el niño participe, reaccione, pida o comente
Etapas Iniciales
Leer en voz alta todos los días alimenta el interés del niño para escuchar.
Padre Lee: Empieza a leer al bebé tan pronto como nacen. Canta, susurra, usa voces altas y bajas, rimas y lo hace divertido.
Niño Responde: Comienza a desarrollar la conciencia de sonido. Él podría ser consolado por canciones e historias conocidas.
Padre Lee: Enfatiza frases divertidas y repetitivas o palabras. Usa muchos libros e incluyen gestos, expresiones faciales y acción.
Niño Responde: Tal vez repita ciertos sonidos o palabras. Él puede comenzar a completar parte de una frase.
Habilidades En Aumento
Libros nuevos y conocidos se suman a la emoción del aprendizaje del lenguaje.
Padre Lee: Habla acerca de los dibujos en la portada y en cada página. Improvisa para conectarse con los intereses e ideas del niño.
Niño Responde: Podría señalar a los dibujos. Tal vez añada a lo que se dice o haga preguntas.
Padre Lee: Hace preguntas abiertas que pueden tener varias respuestas. Discute los conceptos y sentimientos y facilita conocimientos básicos.
Niño Responde: Podría responder a preguntas sencillas. Podría relatar la historia de sus propias experiencias.
Habilidades Continuas
El orden de las historias y el conocimiento de palabras impresas aumentan a las habilidades de alfabetización que ya están surgiendo.
Padre Lee: Habla acerca de lo que va a pasar o discute sobre el principio/medio/ o final de una historia. Amplía la trama y añade al vocabulario.
Niño Responde: Él puede predecir posibilidades o cambiar la historia. Él puede usar las palabras de los libros en sus conversaciones.
Padre Lee: Mueve su dedo debajo de las palabras impresas de izquierda a derecha. Identifica letras conocidas o combinaciones de sonidos de letras conocidas cuando esto encaja con la historia y el nivel de niño.
Niño Responde: Espontáneamente podría apuntar a las letras que él reconoce. Pudiera disfrutar de recitar rimas y “leerle” a los demás.
Las familias pueden empezar a leer regularmente en voz alta cuando su hijo es un bebé y continuar incluso después de que comienza a leer de forma independiente. Deleitándose con fotos, explorando palabras a través de la expresión y el descubrimiento de las ideas en las historias puede contribuir al amor por los libros y a las habilidades de alfabetización que se el niño usará durante toda su vida.
Leyendo regularmente a un niño con pérdida auditiva
Las familias fomentan la alfabetización al mirar libros, compartiendo historias, disfrutando de rimas y leyendo en voz alta con su niño que tiene pérdida auditiva. Al leer diariamente desde una edad muy temprana ofrece numerosos beneficios de aprendizaje y social. La capacidad auditiva del niño aumenta cuando le leen a diario. Su lenguaje se expande mediante la exploración de diferentes historias. Su habilidad de pensamiento crece al explorar los conceptos presentados en los libros. Las habilidades de conversación del niño se vuelven más complejas después de participar en diálogos sobre los cuentos y discusiones con adultos acerca de los libros. Las familias que leen en voz alta regularmente promueven avance en la comunicación, la cognición, la lectura, la escritura y el éxito escolar.
Las técnicas descritas aquí ayudarán a los padres a enriquecer las experiencias de la lectura en voz alta de sus hijos con pérdida auditiva. Estos consejos pueden ser utilizados en cualquier enfoque de lenguaje y comunicación. A través de la lectura compartida los padres y su niño puede desarrollar un vínculo especial entre ellos y el mundo de los libros. El uso de estas estrategias de gran alcance puede transformar el tiempo de la lectura en una rutina gratificante llena de asombro, la risa, confianza y aprendizaje.
Técnicas para mejorar la lectura en voz alta:
Ajuste—varíe cuándo, dónde y cuánto tiempo leerá para mantener la atención de su niño
Elija—seleccione diversas historias y libros ilustrados para despertar la curiosidad
Discuta—promueva la memoria auditiva recordando o recitando partes de las historias
Amplifique—relacione algunas historias a las experiencias propias del niño o juego imaginativo
Resalte—enfatice ciertas palabras periódicamente para introducir los sonidos del habla
Ritmo—adopte un paso que proporciona tiempo para la anticipación y la comprensión
Repita—ofrezca frecuentes oportunidades para leer y releer los favoritos
Estimule—utilice expresiones y demuestre que está disfrutando para incitar la audición
Tome turnos—comparta los roles para que el niño señale a las imágenes, pase las páginas y “lea”
Espere—haga una pausa a menudo para que el niño participe, reaccione, pida o comente
Etapas Iniciales
Leer en voz alta todos los días alimenta el interés del niño para escuchar.
Padre Lee: Empieza a leer al bebé tan pronto como nacen. Canta, susurra, usa voces altas y bajas, rimas y lo hace divertido.
Niño Responde: Comienza a desarrollar la conciencia de sonido. Él podría ser consolado por canciones e historias conocidas.
Padre Lee: Enfatiza frases divertidas y repetitivas o palabras. Usa muchos libros e incluyen gestos, expresiones faciales y acción.
Niño Responde: Tal vez repita ciertos sonidos o palabras. Él puede comenzar a completar parte de una frase.
Habilidades En Aumento
Libros nuevos y conocidos se suman a la emoción del aprendizaje del lenguaje.
Padre Lee: Habla acerca de los dibujos en la portada y en cada página. Improvisa para conectarse con los intereses e ideas del niño.
Niño Responde: Podría señalar a los dibujos. Tal vez añada a lo que se dice o haga preguntas.
Padre Lee: Hace preguntas abiertas que pueden tener varias respuestas. Discute los conceptos y sentimientos y facilita conocimientos básicos.
Niño Responde: Podría responder a preguntas sencillas. Podría relatar la historia de sus propias experiencias.
Habilidades Continuas
El orden de las historias y el conocimiento de palabras impresas aumentan a las habilidades de alfabetización que ya están surgiendo.
Padre Lee: Habla acerca de lo que va a pasar o discute sobre el principio/medio/ o final de una historia. Amplía la trama y añade al vocabulario.
Niño Responde: Él puede predecir posibilidades o cambiar la historia. Él puede usar las palabras de los libros en sus conversaciones.
Padre Lee: Mueve su dedo debajo de las palabras impresas de izquierda a derecha. Identifica letras conocidas o combinaciones de sonidos de letras conocidas cuando esto encaja con la historia y el nivel de niño.
Niño Responde: Espontáneamente podría apuntar a las letras que él reconoce. Pudiera disfrutar de recitar rimas y “leerle” a los demás.
Las familias pueden empezar a leer regularmente en voz alta cuando su hijo es un bebé y continuar incluso después de que comienza a leer de forma independiente. Deleitándose con fotos, explorando palabras a través de la expresión y el descubrimiento de las ideas en las historias puede contribuir al amor por los libros y a las habilidades de alfabetización que se el niño usará durante toda su vida.